Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Índice de Precios de Consumo (IPC) en España cerró el año 2024 con una tasa anual del 2,8%, la cual coincide con la media del año. Aunque el IPC está lejos del 3,1% que cerró el año 2023, sí subió dos décimas respecto a noviembre. El incremento se debe principalmente al encarecimiento de los combustibles y, en grado más bajo, al aumento de precios en ocio y cultura, como los paquetes turísticos.
CÓMO AFECTA LA INFLACIÓN A LAS ENTIDADES
Aunque la ley no obliga a las organizaciones a incrementar el salario de su plantilla según el IPC, se puede coger de referencia para que el personal no pierda poder adquisitivo.
Cabe recalcar que el aumento de los costes energéticos y de transporte afecta directamente a los gastos operativos de las entidades. Para hacer frente a estos retos, es necesario revisar los presupuestos y optimizar recursos.
AUMENTO DEL SALARIO MÍNIMO INTERPROFESIONAL (SMI)
Actualmente, el Salario Mínimo Interprofesional es de 1.134 euros brutos en 14 pagas. No obstante, el Gobierno español ya ha acordado con los sindicatos un incremento de 50 euros. Así pues, una vez aprobado por el Parlamento, el SMI se elevará hasta los 1.184 euros brutos en 14 pagas.
Una vez se apruebe, las entidades deberán ajustar los contratos afectados, ya que hay que tener en cuenta que la subida tiene carácter retroactivo con efectos a 1 de enero de 2025. Por lo tanto, a partir de la aprobación del nuevo SMI, las organizaciones deberán hacer frente a la diferencia en la siguiente nómina. Finalmente, habrá que ver si el nuevo SMI estará sujeto a las retenciones del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) o, como ocurrió el año anterior, se modificará para que las personas que cobren el SMI no tengan retenciones en la nómina.